La inteligencia artificial aplicada en el ganado porcino: ¿qué nos espera en el futuro?
Miguel Vargas Brizuela
Director comercial de Isagri España
04/06/2025
El sector porcino ha tenido una gran evolución a lo largo de los años en ciertos aspectos, en relación con la aplicación de la tecnología. Se trata de trabajos clave en las granjas, como es la limpieza de las propias instalaciones, el manejo de la alimentación -que es uno de los aspectos en los que más se ha evolucionado- y las pesadas de los animales, que también han tenido una significativa mejora en los últimos años.
La inteligencia artificial nos ayudará en varios ejes: sanitario, bienestar animal, alimentación (ya es una realidad con los robots de alimentación que trabajan con algoritmos para realizar las estimaciones), sostenibilidad, manejo más fácil y sencillo (debido al problema de la mano de obra cualificada en las explotaciones ganaderas), genética, ventas y consumidor. El sector ibérico está obligado a saber interpretar cuáles serán las demandas de futuro de los consumidores para que el sector esté preparado, lo que aportará rentabilidad y estabilidad.
A cambio, la inteligencia artificial necesita infraestructura, datos de calidad, algoritmos adaptados a la porcicultura y personas formadas con criterio. Por esa razón, los riesgos son considerar que la inteligencia artificial es magia, no tener suficientes datos o no hacer una adecuada formación del personal.
A nivel de software, la mayor parte de las explotaciones manejan sistemas informáticos que ayudan en la toma de decisiones, con una gran evolución en los últimos años. Respecto a la toma de datos, se pasó de la toma de datos manual a una toma de datos más automática con las PDA, que fue un hito de cambio, a la actualidad de los smartphones, que ha supuesto un gran cambio en el sector. También ha cambiado el método de gestión.

Proyecto de Isagri
La inteligencia artificial debe ser decisiva en la toma de decisiones, pero para ello necesita una buena recogida de datos. En la actualidad, el productor puede buscar la información de un lote o de un animal concreto para conocer toda la información en función de unos parámetros concretos. La inteligencia artificial propondrá, en función de los análisis que se han ido recogiendo, y señalar directamente el lote de la explotación que se encuentra con dificultades. Además, señalará los animales concretos que tienen dificultades. No será por una serie de datos concretos que se hayan marcado, sino por un análisis global de la explotación.
Ya es una realidad el enlace con la base de datos de la asociación Aeceriber, por lo que todos los productores podrán volcar todos los datos necesarios. Isagri también trabaja con casas de genética para poder incorporar y enviar esa información. Por lo tanto, la inteligencia artificial permite que todas las bases de datos puedan trabajar juntas y que estén interconectadas, para que el usuario no tenga que duplicar o triplicar la información.
Además, se está avanzando con las empresas que trabajan en instalaciones para las granjas: máquinas de alimentación, sensores… Para el funcionamiento de todos estos sistemas, será clave la recogida de datos. Se suele decir que ‘el dato será el nuevo petróleo de la economía’.

Conclusiones
- La inteligencia artificial es una herramienta en el sector del porcino ibérico. No es un fin, pero nos aportará mucho valor. El factor humano es clave.
- No es magia, pero nos puede convertir en magos en la toma de decisiones.
- Debemos estar informados de los avances y los retornos de la inversión, lo que nos aportará competitividad.
- Esto no ha hecho nada más que empezar. Se calcula que en cinco o diez años, habrá una revolución.