14/10/2020 - 20/10/2020 - Webinar

Fertilizantes y Bioestimulantes 2020

Bioestimulantes: Una herramienta clave para conseguir una agricultura rentable y sostenible

"Para nosotros innovar siempre ha sido sinónimo de avanzar, aunque durante mucho tiempo lo hayamos hecho a contracorriente"

Entrevista a Francisco Espinosa, director de I+D+i de Seipasa

Alejandro de Vega10/11/2020

El Ministerio de Ciencia e Innovación acaba de conceder el Premio Nacional de Innovación 2020 a Seipasa por “apostar decididamente por la innovación en un sector tradicional y fuertemente regulado, generando un modelo de negocio basado en tecnología natural”, según argumentó el jurado de este importante galardón. En esta entrevista hablamos con el director de I+D+i de Seipasa para conocer su opinión sobre los principales retos del sector agrario y analizar el momento actual de esta empresa española con presencia internacional y especializada en el desarrollo y formulación de productos bioinsecticidas, biofungicidas y bioestimulantes.

¿Qué supone para Seipasa recibir un galardón de la importancia que tiene el Premio Nacional de Innovación?

Representa una satisfacción muy importante porque es el premio a 22 años de trabajo. Este galardón reconoce la visión y la capacidad de Seipasa de anticiparse al cambio que hoy en día vive la industria agrícola. El mercado demanda soluciones sostenibles y eficaces. Lo reclama el mercado y lo reclaman los consumidores, que desean consumir frutas y hortalizas saludables y libres de residuos.

Seipasa está orientada a la producción de esas soluciones naturales alternativas que está reclamando el mercado ante la progresiva desaparición de las materias activas de origen químico. Los agricultores necesitan herramientas alternativas y nosotros somos capaces de diseñarlas y fabricarlas con nuestro modelo Natural Technology.

¿En qué aspectos de la actividad de la empresa se refleja con mayor claridad esa visión de Seipasa de anticiparse a la transformación que la industria agrícola vive hoy en día?

En nuestra capacidad para generar un modelo propio y diferenciador que el mercado ha considerado como válido y necesario. Seipasa fabrica tratamientos de origen botánico y microbiológico para mejorar la salud de los cultivos y combatir plagas y enfermedades. ¿Dónde está nuestra ventaja competitiva? En la experiencia, el conocimiento y la tecnología.

La principal ventaja competitiva de Seipasa, y allí donde la compañía ha afilado su vertiente innovadora, pasa por dos factores esenciales. Por una parte, la identificación y selección de las materias activas naturales más eficientes para asegurar la máxima eficacia de sus productos en cualquier lugar del mundo y ante cualquier condición de aplicación.

Por otra parte, en la formulación. Seipasa parte de la materia prima que proporciona la naturaleza, aprovechando todo su potencial para aplicar a los cultivos, y lo hace con la tecnología más avanzada. Es decir, partimos de la materia prima que nos proporciona la naturaleza, pero lo hacemos con la tecnología más avanzada del S.XXI.

Francisco Espinosa, director de I+D+i de Seipasa
Francisco Espinosa, director de I+D+i de Seipasa.

¿En qué momento llega este reconocimiento y qué nuevos proyectos tiene la empresa en marcha?

Llega en un momento dulce y especial. Caminamos hacia nuestro 25 aniversario y este premio es un espaldarazo a toda una trayectoria. Hoy en día, todas las empresas han desarrollado su línea bio y ecológica. Todos queremos ser sostenibles y estar alineados con el medio ambiente, pero nosotros lo hemos estado desde el principio, desde el momento de nuestra creación. Hoy en día puede parecer una constante en el mercado, pero hace más de dos décadas fuimos pioneros a la hora abrir este camino. Por eso, para nosotros innovar siempre ha sido sinónimo de avanzar, aunque durante mucho tiempo lo hayamos hecho a contracorriente.

Acerca de los nuevos proyectos, nuestro objetivo pasa por consolidar nuestra expansión internacional y obtener los nuevos registros fitosanitarios en los nuevos mercados. Crecemos sobre la base del conocimiento y la inversión en registros fitosanitarios. Cuando Seipasa da el salto a un mercado internacional de un país concreto lo hace sobre la base del trabajo previo de registro de sus productos en ese país. El registro es una garantía de calidad que autoriza la comercialización de un producto en un mercado concreto y, por ese motivo, tiene un valor esencial en América del Sur y América Central.

¿Qué importancia tiene para Seipasa el mercado sudamericano en estos momentos? ¿Qué otras regiones son ahora mismo una oportunidad para introducir la ‘tecnología natural’ de la compañía?

América Latina es un mercado en continua expansión para nosotros. Es un mercado clave porque nos permite enriquecernos de la experiencia acerca del uso y la eficacia de nuestros productos. Todo el conocimiento que obtenemos lo reinsertamos en el proceso de mejora continua de los mismos. Es la ventaja de disponer de 46 registros fitosanitarios en 14 países.

Recientemente hemos anunciado nuestra expansión en Colombia, con el inicio de la comercialización de nuestro catálogo de productos. Colombia se suma a Chile, Ecuador, Perú o México, donde ya contamos con una trayectoria y una red de distribución consolidada.

Laboratorio de la empresa Seipasa
Laboratorio de la empresa Seipasa.

¿Cómo ve Seipasa la realidad del sector primario en España en este año 2020 tan difícil y excepcional?

El sector primario ha reafirmado su papel esencial para la sociedad durante la pandemia. En los momentos más duros del estado de alarma nunca faltó producto fresco en los mercados. El abastecimiento de frutas y hortalizas siempre estuvo garantizado y ello fue gracias al trabajo de miles de agricultores y de toda la cadena de producción del sector primario. Debemos estar satisfechos de ello y trabajar para que las nuevas generaciones vean el valor de la agricultura y deseen regresar a ella.

¿La transición hacia una agricultura más sostenible y eficiente cuenta en estos momentos con la tecnología necesaria para lograr el cambio que se persigue?

Cuenta con muchas herramientas para ello, por ejemplo la microbiología y el uso de microorganismos en la lucha contra plagas y enfermedades. Es un área con múltiples posibilidades de desarrollo en agricultura y con un papel clave el futuro a corto y medio plazo. Se trata de un área que hemos reforzado desde el departamento de I+D+i de Seipasa y cuyo resultado ya está presente a través de varios productos biofungicidas y bioestimulantes ya en el mercado.

¿Qué factores estiman que van a ser más determinantes en la conversión hacia ese nuevo modelo?

Sobre todo, una mejor adecuación entre ciencia y reglamentación. Me explico: estamos en un sector fuertemente regulado. Poner en el mercado un producto biofungicida, a pesar de tener los recursos para ello, requiere de un proceso excesivamente largo y tortuoso en algunos momentos. El ritmo de aprobación registral de nuevas soluciones es muy lento y eso perjudica a los agricultores, porque retrasa la llegada de alternativas necesarias.

La disponibilidad de bioestimulantes y biopesticidas en Estados Unidos es mucho mayor que en Europa. En Europa están desapareciendo materias activas, pero el ritmo de aparición de nuevas soluciones con autoridad registral es muy lento. No existe equilibrio en este ritmo y eso sí es un problema para los productores.

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